¿Queréis una receta de torrijas tradicionales caseras? Eso es porque ya huele a Semana Santa, ¿me equivoco? Y es que esta receta se ha convertido ya en un clásico de los dulces de Semana Santa.

Poder disfrutar de unas torrijas en casa siguiendo la receta tradicional no tiene precio. Es algo que va a gustar a la gran mayoría. Continúa leyendo esta receta de torrijas de toda la vida para sorprender a familiares y amig@s.

La historia de las torrijas

Las torrijas han llegado para quedarse. Cada año ganan más puntos de popularidad entre nuestra sociedad. Y es que, ¿quién puede resistirse a este dulce tan delicioso?

El origen de las torrijas es bastante incierto (como la mayoría de las elaboraciones culinarias). Se asocia, principalmente, al periodo de Semana Santa. Esto es debido a la privación de ciertos alimentos que se hacía antiguamente.

A mí me pasa y seguro que a vosotros también. ¿No relacionáis la Semana Santa con dulces? Torrijas de leche, torrijas de vino, buñuelos, pestiños, rosquillas, huevos de chocolate, monas de pascua o leche frita. Si no la habéis probado, os dejo la receta tradicional de leche frita:

Las torrijas caseras, una elaboración muy humilde desde la época romana

La receta de torrijas tradicionales nació como una elaboración muy humilde. Se trataba de un dulce que se podía preparar en cualquier hogar debido al uso de ingredientes básicos. Además, era (y es) un dulce muy calórico y muy económico.

Mojar el pan en leche, caldos, potajes, sopas o vinos era algo muy habitual hace algunos siglos. Más aún si el pan había quedado ya algo duro y era muy arduo comerlo solo. Por eso, los romanos, ya aprovechaban ese pan duro, mojado en leche y echaban miel por encima. Como veis, no ha variado mucho de la idea original.

Las torrijas de leche en Semana Santa

Todos esos dulces de Semana Santa de los que hemos hablado están relacionados con ese periodo debido a su aporte calórico. Como todos sabéis, la Iglesia estableció que durante el periodo de Pascua se debía hacer ayuno y abstinencia de los productos que ésta designaba, como la carne.

Debido a esa implantación, la gente tuvo que empezar a buscar maneras de ingerir productos permitidos por la Iglesia con un aporte calórico elevado para poder continuar con sus trabajos en el campo. Y ahí estaban los huevos, el azúcar y el pan, un cóctel calórico sin lugar a duda.

Con las torrijas de Semana Santa, además de permitirles poder continuar con sus arduas labores en el campo, los ingredientes se podían encontrar con mucha facilidad en cualquier hogar de la época. Y se trataba de ingredientes muy económicos.

Hoy en día, pese a la inflación que estamos viviendo y los precios actuales de la luz, aún podemos hablar de ingredientes baratos. Por ello, preparar esta receta de torrijas tradicionales en casa, no ocasionará un gran desembolso.

¿Qué necesito para hacer la receta de torrijas tradicionales caseras?

Hacer unas buenas torrijas en casa es muy sencillo. Solamente vamos a necesitar 4 ingredientes básicos. Estos son leche, azúcar, pan y huevos. Con estos ingredientes vamos a ser capaces de hacer unas excelentes torrijas de toda la vida.

La receta tradicional de torrijas utiliza estos 4 ingredientes principales. Pero a partir de aquí, podéis usar los que a vosotros más os convengan.

¿Qué azúcar utilizar para mis torrijas caseras?

Podéis utilizar el azúcar que ya tengáis en casa. Podéis usar azúcar blanco, azúcar moreno o, incluso, panela.

Yo no lo he probado, pero si tenéis cualquier otro tipo de edulcorante que sea capaz de endulzar el líquido con el que empaparemos las torrijas, debería de funcionar de igual modo. Dejadnos en los comentarios si vosotros usáis eritritol, sacarina, stevia, xilitol o cualquier otro sustituto del azúcar.

¿Qué tipo de pan debo usar para hacer torrijas en casa?

Podéis usar aquella barra de pan que más os guste. Tipos de pan que os funcionaran, baguette, ciabatta o chapata, pan de molde, pan de brioche. Y si queréis la excelencia, podéis hacer vuestras propias barritas de pan caseras.

¿Qué tipo de leche es la mejor para hacer torrijas de leche?

Las recetas tradicionales de torrijas utilizaban leche de vaca entera. Pero hoy día, tenemos infinidad de opciones para sustituir la leche en una receta de torrijas. Podéis usar la que tengáis en casa, leche de vaca de cualquier tipo, ya sea entera, desnatada, semi.

Pero también podéis utilizar cualquier leche vegetal, como, por ejemplo, leche de soja, leche de avena, leche de arroz, leche de almendras… Incluso podéis utilizar vino y tendréis unas deliciosas torrijas de vino.

¿Qué cantidades debo usar para hacer torrijas en casa?

Las cantidades de los ingredientes para vuestras torrijas de leche caseras, las vais a elegir vosotr@s. Lo único que haremos nosotros será daros las pautas que seguimos, pero, por supuesto, si os gustan más dulces, menos dulces, más empapadas, menos empapadas, vais a ser vosotr@s los que decidáis como hacer vuestras torrijas tradicionales en casa.

Receta de cómo hacer torrijas tradicionales caseras

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Receta de torrijas tradicionales caseras

¿Queréis una receta de torrijas tradicionales caseras? Eso es porque ya huele a Semana Santa. Y es que esta receta se ha convertido ya en un clásico de los dulces de Semana Santa.

Poder disfrutar de unas torrijas en casa siguiendo la receta tradicional no tiene precio. Es algo que va a gustar a la gran mayoría. Continúa leyendo esta receta de torrijas de toda la vida para sorprender a familiares y amig@s.

Plato Postre

Cocina Española

Keyword leche, pan, Semana Santa, torrijas

Tiempo de preparación 15 minutos minutos

Tiempo de cocción 25 minutos minutos

Tiempo de reposo 45 minutos minutos

Tiempo total 1 hora hora 25 minutos minutos

Raciones 16 unidades

Autor Cristian Álvarez

Cost 2€

Equipment

• 1 Cazo de acero inoxidable de 18 cm
• Fuente de cristal rectangular
• Sartén antiadherente de 18 cm
• Bol mezclador grande y amplio

Ingredientes

• 500 mL leche de vaca
• 100 g azúcar
• 1 ud naranja
• canela
• 1 ud barra de pan
• 4 uds huevo
• aceite de oliva

Elaboración paso a paso

• El primer paso será aromatizar la leche de nuestras torrijas caseras. Para ello, en un cazo de acero inoxidable como este, agregamos la leche, el azúcar, la canela (al gusto) y la piel o ralladura de una naranja.

  Ponemos el cazo con todos los ingredientes a fuego medio y calentamos hasta justo antes de hervir, unos 10 minutos. Tapamos el cazo y dejamos infusionar durante 30 minutos.
  500 mL leche de vaca, 100 g azúcar, 1 ud naranja, canela
  
• Con la leche ya atemperada e infusionada, vamos a empapar las torrijas. Empezamos cortando la barra de pan a rebanadas, del grosor que queráis. En una fuente de cristal rectangular como esta, vertemos la leche infusionada e introducimos las rebanadas de pan. Las dejamos empapar de leche hasta que ya no absorban más líquido.
  1 ud barra de pan
  
• Ahora toca rebozar las torrijas empapadas en leche. En otro cazo de acero inoxidable o una sartén pequeña como esta, agregamos bastante aceite de oliva para cubrir nuestras torrijas y calentamos a fuego alto.

  Mientras el aceite de calienta, batimos bien los huevos en un bol amplio como este. Con mucho cuidado, rebozamos la torrija en huevo y la pasamos al cazo para freírla.
  aceite de oliva, 4 uds huevo
  
• Cuando las torrijas estén bien doradas, las apartamos sobre un plato con papel absorbente. Las dejaremos reposar para que suelten el exceso de aceite.

  Si os gustan calentitas, este será el momento de comerlas, si no, podéis guardarlas en la nevera cuando ya no estén calientes. De esta manera podéis hacer una gran cantidad e ir sacando torrijas caseras durante toda la Semana Santa.
  
• El último paso será decorar vuestras torrijas hechas en casa. Las podéis decorar como más os gusten. Por ejemplo, con frutos rojos, helado de nata, helado de chocolate, leche condensada, un crumble casero… Dejad volar vuestra imaginación…
  

Notas

1. No importa lo duro que esté el pan o cuantos días lleve hecho. Si tenéis pan duro, genial, así lo aprovecháis. Si tenéis que comprarlo, ningún problema. Cuando las empapéis en leche, lo que hay que tener en cuenta es si aún absorben más leche. No las dejéis mucho tiempo porque si no se os romperán al rebozarlas en huevo.
2. En el momento de freír las torrijas, es recomendable hacerlo de a poco. Por ejemplo, de dos en dos o tres en tres. De otro modo, la temperatura del aceite bajara más rápido y tardareis más en freír las torrijas ya que tendrá que volver a calentarse de nuevo. Freír pocas torrijas a la vez también os ayudara a conseguir el punto exacto de doradito.
3. En función de la temperatura del aceite, cada torrija tardara unos dos minutos por lado en dorarse. Esto es simplemente una aproximación, es algo que deberéis controlar vosotr@s.

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Café Irlandés estilo Martín Berasategui

La entrada Receta de torrijas tradicionales caseras se publicó primero en SartenPorElMango.

¡La Navidad ya está aquí! ¡Sorprende a tus invitados con este tronco de Navidad de chocolate y nutella! Este tronco de navidad de dos colores con escamas de chocolate será la envidia de cualquier aficionado a la cocina.

En esta época del año no pueden faltar las recetas navideñas y mucho menos las recetas de repostería. ¿A quién le amargar un dulce en Navidad?

No hay nada mejor que acabar la cena de Nochebuena o la comida de Navidad con un postre espectacular. Sí, lo sé, después de los banquetes que nos metemos, poco espacio habrá en el estómago. Pero siempre hay un hueco para el postre, ¿no?

El origen del Tronco de Navidad

Tronco de Navidad, tronco navideño, bûche de Noël o Christmas log. Da igual cómo lo llames, todos sabemos de qué estamos hablando. Y, al menos yo, estamos deseando de que llegue la Navidad para prepararlo y ofrecerlo a todos nuestros invitados.

El Tronco de Navidad es un postre tradicional que se sirve durante la Navidad en gran parte de Europa. Parece que el origen de este postre se sitúa en Francia aunque se desconoce el autor. Algunas reseñas apuntan a un aprendiz en una chocolatería del barrio parisino Saint-Germain-des-prés sobre el 1834.​

Lo que es seguro, casi al 100%, es que el origen del postre del Tronco de Navidad fue inspirado debido a la tradición precristiana de quemar un leño grande de madera para celebrar el solsticio de invierno.

Esta tradición ha derivado de diferentes maneras por las diferentes regiones europeas y gracias a ello tenemos otras tradiciones como el Yule log en las Islas Británicas, Tizón de Nadal en Galicia o el Tió de Nadal en Cataluña.​

Pasos principales para hacer un tronco de Navidad de chocolate y nutella

La base de este tronco de Navidad de chocolate y nutella es un bizcocho genovés. No os asustéis, un bizcocho genovés no es más que un bizcocho sin impulsor químico. Para conseguir una excelente esponjosidad, montaremos las claras de los huevos a punto de nieve. La clave será no romper esas burbujas de aire atrapadas en el mezclado de los ingredientes.

Verteremos la masa en una bandeja de horno y enrollaremos el bizcocho en caliente para que no re rompa. Cuando haya reposado un poco, sólo tendremos que rellenarlo con nuestra Nutella casera.

El último paso será bañarlo en chocolate en fundido. Aquí tenéis muchas opciones, podéis usar un chocolate blanco, chocolate con leche o un chocolate negro con alto porcentaje de cacao.

La decoración ya forma parte de vuestra imaginación. Como podéis ver, yo he hecho un bizcocho de dos colores. Para ello sólo he tenido que separar una parte de la masa del bizcocho y añadir cacao en polvo para que tome ese color marrón oscuro.

Para la decoración, he recubierto el tronco de Navidad con escamas de chocolate.

Receta de cómo hacer un tronco de Navidad de chocolate y nutella

Tronco de Navidad de chocolate y nutella

Receta de Cristian ÁlvarezPlato: PostresCocina: FrancesaDificultad: Media

Raciones

8

Tiempo de preparación

25

minutos

Tiempo de cocción

15

minutos

Tiempo de reposo

25

minutos

Tiempo total

1

hora 

5

minutos

Si te gusta el café y quieres un postre sencillo, prueba este Café Irlandés estilo Martín Berasategui, lo vas a flipar. La preparación es extremadamente fácil y sencilla. El sabor y la textura, fuegos artificiales para el paladar.

Ingredientes

• 4 huevo tamaño M

• 60 g + 60 g de azúcar

• 60 g + 60 g de harina de trigo

• 150 g de crema de cacao y avellanas casera

• 150 g de chocolate para fundir

• UTENSILIOS

• Vaso para batidora

• Bol grande de cristal

• Varillas eléctricas

• Espátula de silicona

• Tamiz de repostería

• Tapete de silicona para hornear

Pasos a seguir

• Empezaremos haciendo el bizcocho genovés. Para ello, cascamos los huevos y separamos las claras de las yemas. Ponemos las claras dentro del vaso batidor y las yemas dentro del bol de vidrio amplio.
  Ahora montaremos las claras a punto de nieve. La batidora de varillas será imprescindible en este paso, ya que ahorraremos mucho tiempo. Batiremos las claras durante unos 3-4 minutos y cuando empiecen a tener textura, agregaremos los primeros 60 de azúcar poquito a poco.
• Turno ahora para las yemas. Vertemos los otros 60 g de azúcar sobre nuestras yemas y con las varillas eléctricas batimos los dos ingredientes hasta que la mezcla empiece a blanquear. Nos llevará algo más de un minuto. Es posible que la mezcla doble su volumen.
• Ahora integraremos las claras a punto de nieve con las yemas, despacito y con movimientos envolventes. Lo podéis hacer con una cuchara o una espátula de silicona.
• Turno de la harina, la pasaremos por el tamiz y la agregaremos sobre la mezcla anterior. Lo integraremos todo bien.
• Precalentamos el horno a 180 °C.
  Sobre la bandeja del horno, colocamos un tapete de silicona y, sobre él, vertemos nuestra masa del bizcocho genovés.
  Horneamos la masa durante unos 10-15 minutos. Hemos de vigilar que el bizcocho no se nos queme, debe de tomar color pero sin pasarse.
• Con el bizcocho horneado, lo dejamos enfriar 5 minutos para que pierda frío y lo enrollamos con mucho cuidado. Cubrimos con un paño de cocina.
  Pasados unos 20 minutos, ya podemos desenrollar nuestro bizcocho y rellenarlo con nuestra crema de cacao y avellanas casera. También podéis agregar Nutella o Nocilla.
• Fundimos el chocolate siguiendo las instrucciones del fabricante y lo vertemos sobre nuestro bizcocho enrollado y relleno. Dejamos enfriar en la nevera durante al menos 2 horas y ya lo tenemos listo

Notas

• Es importante que los huevos estén a temperatura ambiente. De no ser así, costará mucho que las claras monten a punto de nieve.
• Cuando agreguemos la harina, recomendamos hacerlo en 2 o 3 veces para que se integre bien.
• No os recomiendo rellenar el bizcocho de productos comerciales como Nutella o Nocilla, mucho mejor si es una crema de cacao y avellanas casera. También podéis optar por rellenar con una mermelada casera o una crema pastelera.
• Para hacer el bizcocho de dos colores, tendréis que separar una mitad de la masa y sustituir una parte de la harina por cacao en polvo.

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¿Buscando cómo hacer trufas de chocolate con Thermomix? !Con esta receta casera triunfarás seguro! Es una receta muy rápida de preparar, una receta de postres esencial para los amantes del chocolate

Si no dispones de ningún robot de cocina tipo Thermomix no te preocupes, te guiaremos para que tú también puedas preparar tus trufas de chocolate y triunfes esta Navidad.

Cada vez quedan menos días para la Navidad y en SartenPorElMango ya estamos pensando qué recetas vamos a preparar para estas fechas tan especiales entre familiares y amigos. Las recetas navideñas están a la orden del día para estas fechas y tener que formar un menú compuesto de pica-pica, platos principales y postres no es tarea fácil.

Por eso es muy importante tener preparado con antelación todo lo que podamos. De este modo, los días que tengamos invitados en casa estaremos más tranquilos en casa y podremos disfrutar más y mejor de su compañía.

Estas trufas de chocolate con Thermomix nos aguantan fácilmente hasta 5 días en la nevera. Por lo tanto, os recomiendo hacer una tirada grande y guardarlas en fiambreras de cristal. A medida que vayan pasando los días de Navidad, las podéis ir sacando al final de cada comida y disfrutar de un buen bocado de chocolate.

Lo bueno que tienen las trufas es que son unos bocados pequeños pero exquisitos y nunca nadie te dirá no a una trufa de chocolate. Y sus usos son múltiples. Los podéis poner al final de la comida, con los cafés e infusiones, y comerlas solas. Pero también os pueden servir para decorar una tarta casera o el pastel que tengáis para el postre.

Pasos principales para hacer trufas de chocolate con Thermomix

Preparar estas trufas de chocolate con Thermomix es tan sencillo y divertido que lo podéis hacer en casa junto a los más pequeños. Se lo pasarán en grande dándole formas inimaginables. ¡SPOILER ALERT! Una vez terminadas, los mayores lo pasarán en grande limpiando la cocina

Vamos al lío, para hacer estas trufas de chocolate en casa primero tendremos que pulverizar azúcar moreno y chocolate, por separado y reservar. A continuación, agregaremos leche condensada, azúcar moreno y mantequilla para fundirlo todo. Para acabar, agregaremos yemas de huevo a nuestra masa. Dejaremos reposar en la nevera y ya podremos dar la forma deseada a nuestras trufas de chocolate. Luego sólo quedará rebozarlas en cacao en polvo.

Además, ya que estamos en Navidad, si queréis podéis emborrachar las trufas y agregar un poco de licor. Podéis usar el que más os guste, vuestro preferido. Podéis añadir un chorretón de ron, licor de almendras o, incluso, licor de naranja.

Nosotros, aprovechando que tenemos bastantes litros de nuestra propia ratafía, le hemos agregado un poco de este licor de hierbas. Estamos encantados con el resultado, porque ha aromatizado ligeramente estos bocados de chocolate

Receta de cómo hacer trufas de chocolate con Thermomix

Trufas de chocolate con Thermomix

Receta de Cristian ÁlvarezPlato: PostresDificultad: Fácil

Unidades

25

Tiempo de preparación

15

minutos

Tiempo de reposo

4

horas 

Tiempo total

4

horas 

15

minutos

¿Buscando cómo hacer trufas de chocolate con Thermomix? !Con esta receta casera triunfarás seguro! Es una receta muy rápida de preparar, una receta de postres esencial para los amantes del chocolate
Si no dispones de ningún robot de cocina tipo Thermomix no te preocupes, te guiaremos para que tú también puedas preparar tus trufas de chocolate y triunfes esta Navidad.

Ingredientes

• 50 g de azúcar moreno

• 150 g de chocolate (negro) especial para fundir

• 40 g de leche condensada

• 30 g de ratafía o licor al gusto (opcional)

• 70 g de mantequilla

• 2 yemas de huevo

• Caco en polvo para rebozar

• UTENSILIOS

• Bol o fiambrera de cristal para reposar la masa

Pasos a seguir

• Agregamos el azúcar moreno y lo pulverizamos por 20 segundos a máxima velocidad. Sacamos y reservamos.
• Ahora introducimos el chocolate en onzas (cuadraditos) y lo trituramos con el turbo hasta que quede casi polvo.
  A continuación, añadimos la leche condensada, el azúcar moreno y, si queremos, el licor deseado. A velocidad 4 y temperatura 60 ºC, lo fundimos durante un par de minutos.
• Ahora es el turno de añadir la mantequilla, lo fundimos todo a velocidad 4 y temperatura 70 ºC durante 1 minuto.
• Para agregar las yemas de los huevos, programaremos 1 minuto a velocidad 4 y sin temperatura. Las yemas las agregamos una a una dejando suficiente tiempo para que se integren bien de manera individual.
• En este momento ya tendremos nuestra masa de las trufas lista. La sacamos del vaso y la vertemos en un bol o fiambrera de cristal y dejamos que repose, al menos, 4 horas en la nevera.
• El último paso será formar bolitas de unos 15 ó 20 gramos con la ayuda de una cuchara pequeña y las manos. El tamaño es opcional, lo podéis hacer a vuestro gusto. Con las bolas formadas, sólo quedará rebozarlas en cacao en polvo. ¡Listas para comer!

Notas

• Si no tenéis en casa azúcar moreno, podéis usar azúcar blanco tranquilamente. Yo he usado el moreno porque al pulverizarlo no queda tan fino como el blanco y se nota cuando muerdes. Además del color, con el azúcar moreno os quedará un negro más intenso.
• Con vuestras trufas de chocolate listas, las podéis guardar en una fiambrera en la nevera y os aguantarán 5 días sin problema. Listas para sacar en el momento que las necesitéis.

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Con este flan de ratafía de Santa Coloma de Farners darás un toque especial al tradicional flan de huevo casero. Y es que el flan es un postre tan agradecido que cualquier versión que se haga queda fenomenal

¿Cuántas versiones diferentes de flanes has probado? Seguro que ni te acuerdas. Flan de huevo, flan de vainilla, flan con ralladura de limón o naranja, flan de coco, flan de chocolate, flan de frutas, flan de frutos secos, flan emborrachado con alguna bebida alcohólica… ¡La lista es interminable!

Yo, en esta ocasión, he querido compartir con todos vosotros este flan de huevo casero con un toque de ratafía. Y, ¿por qué ratafía?, os estaréis preguntando. Pues bien, como todos sabéis, este ha sido el primer año que hemos hecho este licor dulce en casa. Además, coincidiendo con que el pasado fin de semana fue la Fiesta de la Ratafía en Santa Coloma de Farners, no he podido dejar escapar la oportunidad.

Durante este fin de semana, en la población gerundense, todo el pueblo se vuelca con este licor de nueces y hierbas y prepara infinidad de recetas con ratafía. En nuestro caso, hemos publicado esta receta de flan de ratafía, pero si nos sigues en TikTok o Instagram, descubrirás la variedad de pasteles que hemos hecho con ratafía.

La Feria de la ratafía de Santa Coloma de Farners

La primera receta manuscrita de ratafía se encuentra en unas libretas de Francesc Rosquellas, que datan de 1.842. En estos papeles se encontraban recetas y remedios caseros que el autor había ido recogiendo a lo largo de su vida. Pese a eso, de este licor se tiene constancia desde mucho tiempo atrás por toda la cuenca mediterránea.

En el Archivo Histórico Comarcal de esta población gerundense, se conserva el manuscrito original. En él, se pueden encontrar las 4 recetas de ratafía más antiguas de toda Cataluña.

Como cada año, esta fiesta se celebra el segundo fin de semana de Noviembre. Este año, el primero después de la pandemia por el Covid-19, ha sido un éxito rotundo. Mas de 15.000 personas se acercaron a la feria y degustaron litros y litros de ratafía, acabando con todas las existencias de ratafía y copas.

Con la dedicación, el esfuerzo y el sacrificio de la Confraria de la Ratafia y los convecinos de Santa Coloma de Farners, la Feria de la Ratafía se ha convertido, año tras año, en una fiesta cultural para toda la sociedad catalana. Donde cada año se incrementan el número de visitantes, el número de actividades y el número de ratafías presentadas en el concurso popular.

La esencia de esta feria se divide en: el Concurso, la Feria y la Fiesta de la Ratafía. Hace ya 40 años, en 1982, tuvo lugar el primer concurso de ratafía. Para esta 40.ª edición, se han presentado más de 200 ratafías caseras, todo un hito para la asociación, el municipio y, en definitiva, la cultura de la ratafía.

Pasos principales para hacer flan de ratafía de Santa Coloma de Farners

Junto al café irlandés estilo Martín Berasategui, esta receta de flan de huevo casero con un toque de ratafía, es de lo más sencillo que encontraréis en SartenPorElMango.

Para empezar, prepararemos el caramelo, que pondremos en la base de las flaneras. Y, mientras el caramelo se enfría, iremos con la segunda parte de la receta.

Para concluir, la segunda parte no tiene más misterio que integrar bien todos los ingredientes (leche, nata, huevos, azúcar y ratafía), verterlos en las flaneras y hornearlo al baño maría durante unos 45 minutos.

Si, así de sencillo. No me digáis que no os lo pongo fácil

Receta de cómo hacer flan de ratafía de Santa Coloma de Farners

Flan de ratafía de Santa Coloma de Farners

Receta de Cristian ÁlvarezPlato: PostresCocina: EspañolaDificultad: Fácil

Raciones

8

Tiempo de preparación

15

minutos

Tiempo de cocción

45

minutos

Tiempo de reposo

2

horas 

30

minutos

Tiempo total

3

horas 

30

minutos

Con este flan de ratafía de Santa Coloma de Farners darás un toque especial al tradicional flan de huevo casero. Y es que el flan es un postre tan agradecido que cualquier versión que se haga queda fenomenal

Ingredientes

• 300 g de leche entera

• 200 g de nata (M.G. 35%)

• 100 g de azúcar

• 5 huevos

• 20 g de ratafía

• PARA EL CARAMELO

• 100 g de azúcar

• 2 cucharadas de agua

• Unas gotas de limón

• UTENSILIOS

• Cazo

• 1 bol grande

• Varillas eléctricas

• Bandeja grande apta para horno

• 8 flaneras

• Papel de aluminio

Pasos a seguir

• Empezaremos con el caramelo. Para ello, ponemos en el cazo todo el azúcar y un par de cucharadas de agua, junto a las gotas de limón. Dejamos que todo el azúcar se humedezca por completo.
  En este momento, calentamos el contenido a fuego medio-alto y dejamos que el azúcar caramelice. Es importante no mover el cazo hasta que el azúcar tome color.
  Cuando veamos que ya tiene un bonito color a caramelo, lo retiramos del fuego y lo vertemos en el suelo de nuestras flaneras y dejamos enfriar.
• Precalentamos el horno a 200 grados centígrados.
  Continuamos, ahora sí, con la mezcla para los flanes. En un bol, ponemos los huevos, el azúcar, la leche y la nata. Con las varillas eléctricas, mezclamos todos los ingredientes a mínima velocidad. Simplemente queremos integrar todo el contenido.
• Con toda la mezcla anterior homogeneizada, añadimos la ratafía y volvemos a mezclar.
• Con la ratafía bien integrada, vertemos, con cuidado, la mezcla en las flaneras y las colocamos dentro de la bandeja para horno.
  Con las flaneras dentro de la bandeja, agregaremos agua hasta cubrir un poco menos de la mitad de la altura de las mismas.
  Antes de meter la bandeja en el horno, cubriremos las flaneras con una lámina de papel de aluminio para que no se nos seque la capa superior de los flanes.
  Con el horno ya a 200 °C, podemos introducir la bandeja dentro del horno y cocinaremos los flanes unos 45 minutos.
• Cuando saquemos la bandeja del horno, sacamos las flaneras de la bandeja y las dejamos reposar unos 30 minutos y después las pasaremos a la nevera. Para tenerlas allí, al menos, 2 horas.
  Y pasado ese tiempo, ya podremos disfrutar de nuestros flanes de ratafía de Santa Coloma de Farners.

Notas

• Al final, la cantidad de ratafía es opcional. La cantidad indicada en la receta sirve como guía para un aroma moderado en los flanes. Cada uno de vosotros podéis agregar más o menos cantidad según vuestros gustos.
• Para no cometer ningún desastre, podemos usar un embudo para ayudarnos a llenar las flaneras.
• Como todos los hornos son diferentes, os recomiendo que, pasados 40 minutos, probéis con un palillo si el interior está seco. Podéis ir haciendo esta prueba cada 3-4 minutos.

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Si te gusta el café y quieres un postre sencillo, prueba este Café Irlandés estilo Martín Berasategui, lo vas a flipar. La preparación es extremadamente fácil y sencilla. El sabor y la textura, fuegos artificiales para el paladar.

Este postre no es el clásico café irlandés tradicional, el de toda la vida. A esta receta se le añaden yemas de huevos para obtener una crema cuajada irlandesa. La combinación con la nata montada es, sencillamente, sensacional.

Estaba yo el otro día en mi sofá, mirando el programa de cocina de David de Jorge, sí, el archiconocido “Robin Food: atracón a mano armada“. En esas que ese día vino Martín Berasategui

Se puso a hacer un postre, una especie de café irlandés, como una crema cuajada a la irlandesa. Lo vi tan sencillo, tan rápido y con tan pocos ingredientes que pensé… ¡Tengo que hacerlo!

Historia del café irlandés

La historia de cómo se originó el café irlandés o Irish coffee es muy peculiar. Podríamos decir, como lo haría Amador Rivas en la serie de televisión ‘La que se avecina‘, que se trató de una argucia

Para encontrar el origen tenemos que remontarnos unos 80 años, sobre la década de los cuarenta del siglo pasado, concretamente en el año 1943. Debemos ir a la localidad de Foynes, muy cerca de Limerick, en su aeropuerto.

Aquel invierno fue muy duro en esa región. En una de sus noches, un vuelo con destino a Nueva York tuvo que volver al aeropuerto de Foynes, ya que el tiempo atmosférico era terrible. Allí esperaba el personal del restaurante para darles algo de comida y bebida caliente a los fatigados pasajeros.

Al Chef del restaurante, Joe Sheridan, se le ocurrió poner un poco de whisky irlandés en el café de aquella gente. Aquel café fascinó a todos los pasajeros y uno de ellos preguntó al Chef si ese café era brasileño. El Chef, con mucha picardía respondió: “No, es café irlandés“.

Pasos principales para hacer el café irlandés estilo Martín Berasategui

En primer lugar, decir que preparar este café irlandés estilo Martín Berasategui es de lo más sencillo que encontraréis en nuestro blog.

Primero infusionaremos café soluble en una mezcla de leche y nata. Sí, café del normal, del que todos tenemos en casa. Después, mezclaremos unas yemas de huevo con azúcar y whisky, para añadirlo a la mezcla anterior. Una hora y media al horno y ya tendremos nuestra crema cuajada irlandesa, ¿Os lo puedo poner más fácil?

El mayor esfuerzo que tendréis que hacer será mezclar las yemas de huevo con el azúcar con unas varillas manuales, ¿Pero sabéis qué? ¡Creo que lo conseguiréis!

Y os estaréis preguntando… ¿Y qué hago con las claras restantes? ¿Las puedo aprovechar? ¡Por supuesto! ¡Aquí no se desperdicia nada! Al contrario, pasaros por esta receta clásica de panna cotta italiana.

Receta de cómo hacer café irlandés estilo Martín Berasategui

Café Irlandés estilo Martín Berasategui

Receta de Cristian ÁlvarezPlato: PostresCocina: IrlandesaDificultad: Fácil

Raciones

6

Tiempo de preparación

10

minutos

Tiempo de cocción

1

hora 

30

minutos

Tiempo de reposo

15

minutos

Tiempo total

1

hora 

55

minutos

Si te gusta el café y quieres un postre sencillo, prueba este Café Irlandés estilo Martín Berasategui, lo vas a flipar. La preparación es extremadamente fácil y sencilla. El sabor y la textura, fuegos artificiales para el paladar.

Ingredientes

• 250 g de leche

• 250 g de nata (M.G. 35%)

• 15 g de café soluble

• 5 yemas de huevo

• 85 g de azúcar

• 1 c.s. whisky

• PARA LA NATA MONTADA

• 100 g de nata (M.G. 35%)

• 1 c.s. de azúcar glas

• UTENSILIOS

• Cazo mediano

• 2 boles

• Varillas

• Colador

• 6 vasos de cristal

• Vaso mezclador

• Varillas eléctricas

• Manga pastelera

Pasos a seguir

• El primer paso será infusionar el café soluble con la leche y la nata. Para ello, en un cazo mediano, vertemos la leche y la nata y lo llevamos a ebullición. Con los primeros hervores, retiramos del fuego y agregamos el café soluble, removemos, tapamos con film, una tapa o un plato y dejamos infusionar unos 15 minutos.
• A continuación, en un bol, cascamos los huevos y añadimos solo las yemas junto al azúcar. Lo batimos con las varillas manuales y lo vertemos sobre la mezcla de leche, nata y café (que ya estará atemperada) y lo integramos todo bien.
• En otro bol, colamos la preparación para que quede bien lisa. Agregamos una cucharada sopera de whisky y volvemos a mezclar.
• La mezcla anterior la vertemos sobre los vasos de cristal, donde presentaremos nuestro postre. Llenaremos unas tres cuartas partes del vaso para dejar espacio a la nata montada.
  Con el horno precalentado a 85 °C, introducimos nuestra preparación durante 90 minutos. Esto hará que la mezcla cuaje ligeramente.
• Ya solo nos queda que se cocine la mezcla de café. Cuando haya pasado el tiempo de horneado, dejamos reposar alrededor de una hora, para después meter nuestros vasos en la nevera hasta el momento de servir.
• En el momento de servir, ponemos la nata en el vaso mezclador y con las varillas eléctricas montamos la nata. Cuando esté a punto de montar, agregamos el azúcar glas y acabamos de montar la nata. La introducimos en la manga pastelera y servimos sobre la cuajada de café irlandés.
  

Notas

• Si dispones de tiempo, puedes dejar infusionar el café soluble con la mezcla de la leche y la nata durante más tiempo.

Nuestras recetas más dulces

Panellets de piñones. Receta tradicional

Hoy os traemos la receta tradicional de panellets de piñones. Unos dulces tradicionales de los Países Catalanes muy ricos y fáciles de hacer.

Receta de crema pastelera perfecta

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Hojaldre de fresas con crema pastelera casera

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La entrada Café Irlandés estilo Martín Berasategui se publicó primero en SartenPorElMango.

Aprende a hacer esta deliciosa receta de brownie con avellanas y nueces y sorprende a tus invitados. Este bizcocho de chocolate clásico es muy fácil de preparar y queda realmente espectacular, muy tierno, muy esponjoso y para nada seco. Son de esas recetas que repites seguro.

Y si quieres rizar el rizo, acompáñalo de helado de avellana y crumble de avellana como hemos hecho nosotros… Una auténtica maravilla, una explosión de sabor en boca y en la cabeza, os lo aseguro, la combinación es espectacular.

¿Quién no ha probado nunca un brownie de chocolate? Me imagino que todo el mundo. Si no lo conoces con este nombre, no deja de ser un bizcocho de chocolate. Ahora sí, ¿no?

Historia del brownie de chocolate

El brownie es una receta clásica de la gastronomía americana. Su nombre se debe al color marrón que adquiere debido al chocolate, ‘brown‘ en inglés. Aunque, paradójicamente, parece ser que el primer brownie no llevaba chocolate, ¿te lo puedes creer?

Como no podía ser de otro modo, encontrar la primera receta de brownie o a la primera persona que lo preparó no iba a ser tarea fácil. Hay muchas leyendas, mitos e historias alrededor de este bizcocho de chocolate.

Algunas de estas historias cuentan que un chef agregó por error chocolate fundido a una masa para galletas. Otras dicen que un cocinero estaba haciendo un pastel de chocolate pero no tenía suficiente harina para agregar. Y otras relatan que una ama de casa estaba haciendo un pastel de chocolate y se le olvidó agregar el polvo de hornear.

Como veis muchos relatos diferentes, pero todos con un denominador común, el error humano. Como pasó con la súper conocida tarta tatin.

Varias fuentes, como el catálogo de Sears, Roebuck de 1897, citan la primera receta conocida de brownies. Pero no se trataba de un bizcocho de chocolate como lo conocemos hoy, sino de unos dulces de melaza. El nombre se le dio, también, por su color marrón oscuro.

Si queréis conocer un poco más sobre la historia del brownie, os recomiendo leer este interesante artículo de Erin McCarthy.

Pasos principales para hacer el brownie con avellanas y nueces

Preparar este bizcocho de chocolate es tan sencillo que los más pequeños de la casa pueden ayudarte. Solamente hay que verter todos los ingredientes en un bol grande, mezclarlos e integrarlos bien y poner en una bandeja para hornear. No tiene más, tendrás un brownie de chocolate esponjoso con nueces y avellanas de película. Sí, así de sencillo, no puedes decir que no a este brownie con avellanas y nueces .

Y, como comentaba anteriormente, podéis acompañar este brownie de chocolate con un helado, el contraste de temperaturas es genial. Yo he optado por hacer un helado de avellana y es un p**o vicio. Y ya para rematar el postre, el crumble de avellanas como cama del brownie de chocolate y el helado de avellana le da ese toque crujiente tan irresistible…

Nosotros hemos usado una mezcla de avellanas y nueces para añadir a nuestro brownie, pero si te gustan más otros frutos secos puedes hacer la mezcla que tú quieras. Puedes decidir, por ejemplo, agregar almendra o, incluso, sustituir la almendra por las nueces o las avellanas. Y si vas más allá, ¿te imaginas un brownie de chocolate con pistachos? Deja volar tu imaginación…

Si eres alérgico a los frutos secos no hay problema, puedes optar por no agregarlos y obtendrás igualmente un bizcocho de chocolate increíble, lleno de sabor y súper esponjoso.

Receta de cómo hacer brownie con avellanas y nueces

Brownie con avellanas y nueces

Receta de Cristian ÁlvarezPlato: PostresCocina: AmericanaDificultad: Fácil

Raciones

10

Tiempo de preparación

20

minutos

Tiempo de cocción

30

minutos

Tiempo total

50

minutos

Aprende a hacer esta deliciosa receta de brownie con avellanas y nueces y sorprende a tus invitados. Este bizcocho de chocolate clásico es muy fácil de preparar y queda realmente espectacular, muy tierno, muy esponjoso y para nada seco. Son de esas recetas que repites seguro.

Ingredientes

• 180 g de chocolate fundido (cacao 52%)

• 300 g de mantequilla a punto pomada

• 6 g de sal

• 5 huevos

• 360 g de azúcar

• 215 g de harina

• 115 g de avellanas

• 115 g de nueces

• UTENSILIOS

• Bol mediano

• Varillas

• Bol grande

• Batidora eléctrica

• Tamiz o colador

• Lengua pastelera

• Papel para hornear

• Bandeja cuadrada de cristal apta para horno (34 cm x 25 cm)

Pasos a seguir

• Empezaremos mezclando en el bol mediano la mantequilla a punto pomada con el chocolate fundido y la sal. Lo podemos integrar todo bien con la ayuda de unas varillas. Si sois muy chocolateros, podéis incrementar un poquito la cantidad de chocolate fundido.
• A continuación, en el bol grande, cascamos los huevos y añadimos el azúcar. Con la batidora eléctrica, montamos la mezcla hasta tenerla blanqueada. Para que os hagáis una idea, mirad como me quedó en la siguiente imagen.
• Continuamos integrando las dos mezclas que tenemos. En dos o tres veces, integraremos la mezcla de chocolate y mantequilla con los huevos y el azúcar. Para este paso, la lengua pastelera os irá de maravilla.
• Ahora es el turno de la harina, la incorporamos a nuestra mezcla poquito a poquito. Para aseguraros que se integra perfectamente, podéis ayudaros de un tamiz o un colador.
• Ya nos quedan los últimos ingredientes, los frutos secos. Agregamos las avellanas y las nueces a nuestra masa chocolateada e integramos todo bien de nuevo.
• Y ahora sí, ya lo tenemos todo a punto para verter nuestra masa en nuestro molde con papel de hornear. Y cocinamos la masa en el horno a 180° C durante unos 30 minutos.
  Para comprobar si ya está listo, podéis hacer la prueba del palillo.
  

Notas

• Los frutos secos los podéis sustituir por aquellos que más os gusten, como almendras o pistachos.
• Si sois alérgicos a los frutos secos, los podéis obviar y tendréis un brownie de chocolate igualmente delicioso, esponjoso y para nada seco.
• Si os gusta mucho el chocolate, podéis añadir un poco más de chocolate fundido a vuestra mezcla. E incluso podéis utilizar un chocolate con un mayor porcentaje de cacao.
• Nosotros hemos decidido trocear un poco los frutos secos, pero si los quieres agregar enteros, no hay ningún problema.
• Un excelente compañero del brownie de chocolate es un helado. Y el helado de avellana le sienta de maravilla.

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¿Te gusta la panna cotta y quieres probar una diferente? ¿Qué te parece esta panna cotta de albaricoque? Si te gusta el frescor y dulzor de esta fruta, esta panna cotta es para ti.

Ya sabéis como nos encantan las recetas italianas o, al menos, así lo demuestra el número de recetas publicadas. ¿Recordáis la receta tradicional italiana de panna cotta?

El albaricoque, mejor de temporada y de proximidad

Si aprovechamos la fruta de temporada, la comeremos de mejor calidad y a un mejor precio. Y, seguramente, sea recolectada en nuestro país, ahorrando Kg. de CO₂ a la atmósfera.

La temporada del albaricoque es, sobre todo, en verano. Pero según la variedad, también podemos encontrar esta fruta en los meses de primavera. En España, el 70% de toda la producción de albaricoque, proviene de la Región de Murcia.

Por eso, os animamos a comprar albaricoques en los meses de verano, pero, sobre todo, si son de aquí y los venden a granel. Comprando en los pequeños comercios de nuestros barrios y municipios, apoyaremos de una forma directa al consumo local. Comprando fruta a granel, ayudaremos a reducir el plástico que nos rodea a nosotros, a nuestros bosques y a nuestros mares.

Pasos principales para hacer la panna cotta de albaricoque

Para realizar nuestra panna cotta en casa necesitaremos tan sólo 4 ingredientes. Albaricoques, nata con un 35% de materia grasa, azúcar y agar-agar.

Esta es la primera receta del blog en que usamos agar-agar. Hoy en día no cuesta mucho conseguirlo y os animamos a usarlo ya que se trata de una gelatina vegetal. Esta sustancia tiene un poder gelificante bastante alto ya que con sólo un 1% respecto a la cantidad de líquido, se consiguen resultados muy resistentes.

Lo primero que haremos será un puré de albaricoque, nuestra base para la panna cotta. Hacer este puré es bien sencillo, ya que pondremos los albaricoques a calentar junto con la mitad de su peso de azúcar. Durante los primeros 5 minutos de cocción, aprovecharemos para pelarlos, porque será coser y cantar. Luego haremos un fino puré con ayudar de una batidora.

Ese puré lo agregaremos a la nata del 35% lo llevaremos a ebullición y agregaremos el agar-agar. Batiremos enérgicamente para que no se formen grumos y serviremos en nuestros moldes. Llevaremos a refrigerar durante al menos 3 horas y ya podremos degustar nuestro fantástico postre casero

Receta de cómo hacer panna cotta de albaricoque

Panna cotta de albaricoque

Receta de Cristian ÁlvarezPlato: PostresCocina: ItalianaDificultad: Fácil

Raciones

4

Tiempo de preparación

25

minutos

Tiempo de cocción

15

minutos

Tiempo de reposo

3

horas 

Tiempo total

3

horas 

40

minutos

¿Te gusta la panna cotta y quieres probar una diferente? ¿Qué te parece esta panna cotta de albaricoque? Si te gusta el frescor y dulzor de esta fruta, esta panna cotta es para ti

Ingredientes

• PARA EL PURÉ DE ALBARICOQUE

• 200 g de albaricoque

• 100 g azúcar (moreno)

• PARA LA PANNA COTTA

• 200 g de nata 35% M.G.

• 100 g de puré de albaricoque

• 5 g de agar-agar

Pasos a seguir

• Empezaremos haciendo el puré de albaricoque. Para ello, pondremos en una cacerola los albaricoques por la mitad junto al azúcar y calentaremos a fuego medio-alto.
  El azúcar puede ser blanco o moreno, como más os guste.
  El puré que os sobre lo podéis aprovechar para decorar el plato.
• A medida que se vayan cocinando, irán perdiendo agua. Removemos de vez en cuando para que no se quede el azúcar abajo y se nos queme.
  Pasados unos 5 minutos, el albaricoque estará tan tierno que ya podremos quitarle la piel exterior.
  A los 10-12 minutos ya podremos retirarlos del fuego y con ayuda de una batidora, haremos nuestro puré de albaricoque.
• En otra cacerola, agregamos 100 g del puré de albaricoque que acabamos de hacer y los 200 g de nata con un 35% de materia grasa. Lo llevamos casi a ebullición. Cuando empiecen los primeros hervores, agregamos el agar-agar en forma de lluvia. Con unas varillas, removemos enérgicamente toda la mezcla durante unos 5 minutos para que el agar-agar no forme grumos.
• Dejamos enfriar la cacerola y cuando esté a temperatura ambiente ya lo podemos servir en nuestros moldes. Debemos poner unas 3 horas los moldes en la nevera para que cuaje toda la mezcla.
• Pasado el tiempo de reposo, ya podemos emplatar nuestra panna cotta de albaricoque. La decoramos con un poco de crumble de galleta, un poco de puré que nos ha sobrado y algunos albaricoques en almíbar y… ¡A disfrutar!

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Receta de crema pastelera perfecta

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¿Queréis un postre rápido y fácil? Esta tarta tatín de nísperos es muy rápida de hacer y súper sencilla. Además solo necesitas 4 ingredientes muy fáciles de encontrar y baratos. ¿Qué más se puede pedir?

La verdad que nunca imagine lo sencillo que podría llegar a ser hacer una tarta tatín. Y aunque la original, como todos sabemos, es de manzana, en esta ocasión hemos querido hacerla de nísperos.

Por suerte hemos tenido la ocasión de tener más de una decena de quilos nísperos ecológicos y de proximidad. Y en una decena de quilos hay muchos nísperos. Y como no podemos dar a basto a comer tanto níspero, hemos hecho mermelada de nísperos, nísperos en almíbar y también esta ‘tarte tatin’ con esta rica fruta.

Historia de la ‘Tarte tatin’

La historia de esta tarta es realmente bien curiosa. Una vez más en el mundo culinario, nació una elaboración fruto de un accidente o descuido. Como también sucedió con la cerveza, el queso, la salsa Worcestershire, la Coca-cola o la ganache de chocolate en el mundo repostero.

Según cuentan en el Hotel Tatin de la localidad francesa de Lamotte-Beuvron, esta tarta fue creada por una de las hermanas Tatin allá por el año 1889.

Al parecer una de las hermanas, con algo de prisa, tuvo que hacer un postre rápido para unos clientes. Hizo un caramelo donde coció unas manzanas y puso en el horno. Pero se olvidó de poner la base y decidió hacerlo mientras la fruta se cocía en el horno. Cuando saco la tarta, la volteo y ya tenía un exquisito postre de tarta de manzana.

Preparación de la tarta tatín de nísperos

Como decíamos al principio de la publicación, la ‘tarte tatin’ es rápida, fácil y barata. Solo necesitamos 4 ingredientes que los encontraremos fácilmente en cualquier supermercado.

Simplemente vamos a necesitar mantequilla y azúcar moreno para hacer un caramelo en el que luego coceremos la fruta deseada, en este caso, nísperos ecológicos y de proximidad. Y por último, necesitaremos una hoja de pasta brisa o masa quebrada. Incluso lo podemos hacer con una hoja de masa de hojaldre.

Como ves, no hay excusas para preparar esta tarta. Si aun así, ves que los nísperos no son de tu agrado, puedes utilizar la fruta que desees. Puedes utilizar manzanas como la tarta tatín original, también podrías utilizar pera, melocotón y por qué no fresa o kiwi. Aquí el limite lo marcas tú y tu imaginación, ¿te imaginas una con un mix de frutas?

Lo primero que haremos será hacer un caramelo con la mantequilla y el azúcar moreno. Después dentro del horno coceremos la fruta con ese caramelo y el último paso será colocar la pasta brisa sobre la fruta y dejar que se dore.

Cuando saquemos del horno nuestro molde, le daremos la vuelta como si de una tortilla se tratara y tendremos lista nuestra tarta de frutas, sencillo, ¿no?

Cómo hacer una tarta tatín de nísperos

Receta patrocinada por Lékué. Compra aquí todos tus artículos de repostería.

Tarta tatín de nísperos

Receta de Cristian ÁlvarezPlato: ReposteríaCocina: FrancesaDificultad: Fácil

Porciones

8

Tiempo de preparación

15

minutos

Tiempo de cocción

40

minutos

Tiempo total

55

minutos

Esta tarta tatín de nísperos es muy fácil y muy rápida de hacer, por lo que no habrá excusas para hacer un postre delicioso en casa y además comer fruta. Como verás a continuación sólo hay 3 pasos fundamentales y son bien sencillos.

INGREDIENTES

• 550 g de nísperos (pelados)

• 125 g de mantequilla

• 200 g de azúcar moreno

• 1 hoja de pasta brisa o masa quebrada (redonda)

• UTENSILIOS

• Sartén mediana/grande

• Molde redondo de 26 cm. de diámetro

Pasos a seguir PARA HACER UNA Tarta tatín de nísperos

• Empezaremos pelando los nísperos, cortándolos por la mitad y sacándoles las semillas y la piel blanca que queda junto a la carne del níspero.
• En una sartén mediana o grande ponemos la mantequilla cortada a cuadraditos y calentamos a fuego medio. Cuando este fundida, agregamos el azúcar moreno y dejamos calentar a fuego medio removiendo frecuentemente.
• Pasados unos 5 minutos, la mantequilla derretida empezara a burbujear y el azúcar empezara a formar caramelo obteniendo una textura cada vez más densa. En los siguientes 5 minutos el caramelo ya debe tener bastante cuerpo. Este es el momento para verter, con mucho cuidado, el caramelo en el molde.
  Sobre el caramelo colocaremos los nísperos uno a uno boca abajo.
• Con el horno precalentado a 200 ºC con calor arriba y abajo introducimos el molde a media altura durante 20 minutos. Durante este tiempo los nísperos se impregnaran del caramelo que hemos hecho.
• Mientras se hornean los nísperos, preparamos la pasta brisa. Para ello la ponemos sobre la encimera y la pinchamos con ayuda de un tenedor.
  Pasados los 20 minutos de horno, sacamos el molde del horno y colocamos sobre el caramelo y los nísperos la pasta brisa. Para después volver a hornear todo junto durante otros 20 minutos.
• Ahora llega el momento clave, debemos girar nuestra tarta con la ayuda de un plato, como si de una tortilla se tratara. Podemos dejar enfriar el molde unos minutos, pero debemos hacerlo rápido para que el caramelo no solidifique.
  Con la tarta volteada, la dejamos reposar unos 15-20 minutos y ya podemos degustarla.
  Si la queremos fría, ¡también estará deliciosa!

Notas

• Opcionalmente puedes cocinar unos minutos los nísperos con el caramelo para que se doren un poco antes de ir al horno. Esto permitirá que los nísperos absorban un poco más de azúcar y el resultado será una tarta más dulce. Nosotros los hemos puesto tal cual, no son muy grandes y en el horno se cuecen rápido.
• Hemos de vigilar mucho que no se nos queme la pasta brisa cuando este en el horno ya que estará en la parte superior

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¿Conocéis el pan de elote? Nosotros lo hemos versionado y hemos hecho este pan de elote esponjoso con pepitas de chocolate. Este dulce es muy típico en toda América Latina debido a que el origen del ingrediente principal se sitúa en ese continente.

Es un dulce que se hace a partir de los granos de maíz en varios países de América Latina. Puede disfrutarse en cualquier momento del año, motivo por el cual es sumamente apreciado en tantas regiones.

Se puede comer como dulce a cualquier hora o como postre después de una comida. Es muy sencillo de preparar, especialmente si se realiza en la licuadora o con una batidora eléctrica. En este supuesto, sólo tendremos que colocar todos los ingredientes para hacer la mezcla que se llevará al horno.

Para aquellos que sois celiacos, os dejo un enlace para que reviséis nuestras últimas recetas sin gluten. Una receta de picoteo que seguro os encanta es este puré de berenjena. Baba Ganoush o Mutabbal:

Origen del pan de elote

A este dulce también se le conoce como torta de jojoto o pastel de choclo tierno, en Costa Rica también se le llama tamal de elote y en los Estados Unidos se encuentra el cornbread.

Como decíamos, el elote fue domesticado por primera vez en México, parece ser que hace ya más de 10.000 años. Y os preguntaréis, ¿qué es el elote? Pues bien, en España lo conocemos como maíz. Ahora sí que os suena, ¿no?

Como os podéis imaginar, el maíz es el cereal por excelencia hoy en día, se utiliza en la mayoría del planeta, formando parte de la alimentación de millones de personas en sus diferentes formas. Y es que el maíz es el Rey, es el cereal que más se cultiva en todo el mundo.

Al ser el continente americano el lugar de origen del maíz y al ser éste colonizado por los europeos, se cree que el origen fue en ese momento. La repostería fue introducida por los europeos en el continente y al encontrar éstos el maíz en grandes cantidades, parece que la mezcla era indispensable.​

Preparación del pan de elote esponjoso con pepitas de chocolate

El motivo de hacer este pan de elote fue debido a una invitación muy especial. Mi hermana nos invitó a comer a su casa y nos cocinó platos con temática claramente mexicana. Al ver esta idea, no pudimos resistirnos y dijimos !nos encargamos del postre!

Estuvimos buscando postres tradicionales mexicanos y nos topamos con este tipo de bizcocho. Nos encantó su rápida preparación y los pocos ingredientes necesarios para elaborarlo. Nunca nos habíamos un imaginado un pastel con maíz, y ésta era la ocasión ideal.

Para este dulce sólo necesitaremos maíz cocido (puede ser maíz dulce en lata), azúcar, huevos y mantequilla. De este modo tendremos un postre totalmente libre de gluten.

Aunque en nuestro caso le agregamos un poquito de harina de trigo para que quedase más un bizcocho esponjoso con estructura. De no agregarle la harina de trigo, quedaría un dulce con más textura a flan.

Y además, decidimos picar un poquito de chocolate para agregarle a modo de pepitas de chocolate para obtener ese sabor a cacao en cada mordisco…

Cómo hacer un pan de elote esponjoso con pepitas de chocolate

Pan de elote esponjoso con pepitas de chocolate

Receta de Cristian ÁlvarezPlato: ReposteríaCocina: MexicanaDificultad: Fácil

Porciones

10

Tiempo de preparación

15

minutos

Tiempo de cocción

45

minutos

Tiempo total

1

hora 

Esta de receta de pan de elote es ideal para comer un bocado dulce a cualquier hora o también se puede degustar como postre después de una comida. Es muy sencillo de preparar, ya que sólo tendremos que colocar todos los ingredientes y machacarlos juntos para hacer la mezcla que se llevará al horno.

INGREDIENTES

• 450 g de maíz dulce (de lata)

• 120 g de azúcar

• 3 huevos

• 90 g de mantequilla derretida

• 90 g de harina de trigo (opcional)

• 100 g de chocolate para fundir

Pasos a seguir PARA HACER UN Pan de elote esponjoso con pepitas de chocolate

• En un bol grande ponemos el maíz, el azúcar y los huevos y los batimos con nuestra batidora eléctrica. También lo podemos poner todo en nuestra procesador de alimentos y machacarlo hasta que quede una masa fina y no queden restos de maíz. Acto seguido agregamos la mantequilla derretida (lo podemos hacer en el microondas) y lo mezclamos todo de nuevo.
• Pasamos nuestra mezcla a un bol, agregamos la harina e integramos bien con ayuda de nuestra batidora de varillas o a mano con un tenedor.
• Con la harina bien integrada es momento de agregar nuestro chocolate que previamente lo habremos picado bien finito con un chocolate. Si queréis ahorraros este paso, podéis comprar directamente lágrimas de chocolate.
• Volvemos a integrar bien y ya tenemos nuestra masa lista.
  Ya podemos coger nuestro molde, engrasarlo bien con mantequilla o aceite y verter sobre él nuestra masa.
  Tendremos el horno ya precalentado a 200 ºC con calor arriba y abajo y podremos introducir nuestro molde durante unos 40-45 minutos a media altura. Durante los últimos 10 minutos lo iremos vigilando para que no se nos queme y haremos la prueba del palillo, cuando salga seco, ya lo podemos sacar!
• Preparamos el molde donde hornearemos nuestro bizcocho. Cortamos y colocamos un trozo de papel de hornear a lo largo de nuestro molde rectangular y engrasamos con un poco de aceite o mantequilla y harina para que no se enganche.
  Con el molde listo, vertemos nuestra masa repartiendo bien por todo el molde.
  Damos unos golpecitos sobre la encimera para que salgan las burbujas que puedan haber en el interior.
• Con el horno precalentado a 180 °C calor arriba y abajo, horneamos nuestra masa durante unos 45 minutos.

Notas

• El molde que hemos usado nosotros tiene un diámetro de 26 cm. Esto es importante para conocer la cantidad de ingredientes a utilizar y el tiempo de horneado. Si usamos un molde más pequeño con las mismas cantidades, el tiempo de horneado será mayor debido que tendrá mayor altura.

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¿Quieres sorprender a tus invitados? ¡Prepara en casa este bizcocho de limón esponjoso con glaseado, van a repetir seguro! El resultado es un bizcocho húmedo, jugoso, tierno y, lo más importante, con sabor a limón de verdad, nada de aromas ni esencias.

Este bizcocho de limón es una auténtica maravilla, de verdad. Queda muy esponjoso y tiene un aroma en boca a limón muy agradable. Con las cantidades que os indicamos, tiene el gusta a limón justo, ni le sobra ni le falta. ¿Será por eso por lo que ésta es una de las recetas dulces más leídas en nuestro blog?

Es un bizcocho muy fácil de hacer y lo vais a tener hecho en un momento. Y seguro que no os queda ni un trocito para el día siguiente

Además, por suerte, podemos encontrar limón en el mercado durante todo el año. Por eso no hay excusas para preparar en casa este bizcocho de limón.

La temporada del limón en España abarca casi todo el año debido a las diferentes variedades existentes.

El árbol del limón, el limonero no tiene un periodo concreto de floración. En cualquier momento que las condiciones climatológicas lo permitan, este árbol está preparado para florecer.

Hay que decir que en España, debido a nuestro clima mediterráneo, la época del año que menos disponemos de esta fruta es en verano ya que la falta de agua en esa época no ayuda a la floración del limonero. En cambio, durante el resto del año, es decir, otoño, invierno y primavera podemos disfrutar de un buen limón nacional.

Preparación del bizcocho de limón

Esta preparación constara de tres partes bien diferenciadas.

En la primera haremos lo que es el bizcocho en sí, mezclaremos bien todos los ingredientes según los pasos indicados a continuación y hornearemos en un molde rectangular nuestra masa.

El segundo paso será hacer un almíbar con jugo de limón, para ello sólo necesitaremos azúcar y jugo de limón. Este almíbar lo introduciremos dentro del bizcocho, ya veréis como.

Y el último paso será hacer un glaseado de limón para ponerlo encima del bizcocho, lo que le acabará de dar a nuestro bizcocho un aroma, un sabor y una textura impresionante.

Cómo hacer un bizcocho de limón esponjoso con glaseado

Bizcocho de limón esponjoso con glaseado

Receta de Cristian ÁlvarezPlato: ReposteríaCocina: TradicionalDificultad: Fácil

Porciones

10

Tiempo de preparación

45

minutos

Tiempo de cocción

45

minutos

Tiempo total

1

hora 

30

minutos

Con este bizcocho de limón esponjoso con glaseado vas a triunfar en casa sin lugar a duda. El resultado va a ser un bizcocho húmedo, jugoso, tierno y, lo más importante, con sabor a limón increíble.

INGREDIENTES

• 200 g de azúcar

• 120 g de mantequilla (punto pomada)

• Ralladura de dos limones

• 3 huevos

• 120 g de nata 35% M.G.

• 2 cucharadas soperas de jugo de limón

• 200 g de harina de todo uso

• 8 g de polvo de hornear

• 4 g de sal

• PARA EL ALMÍBAR DE LIMÓN

• 50 g de azúcar

• 2 cucharadas soperas de jugo de limón

• PARA EL GLASEADO DE LIMÓN

• 120 g de azúcar glas

• 3 cucharadas soperas de jugo de limón

Pasos a seguir PARA HACER UN Bizcocho de limón esponjoso con glaseado

• En un bol grande ponemos el azúcar, junto a la mantequilla a punto pomada y mezclamos bien con la ayuda de las yemas de los dedos. Mezclamos hasta que los dos ingredientes se hayan integrado bien. Posteriormente agregamos la ralladura de los limones y volvemos a integrar bien.
• Ahora toca agregar los huevos. Lo hacemos uno a uno y mezclamos bien.
• Con los huevos bien mezclados, agregamos el jugo de limón y la nata para montar e integramos bien de nuevo.
• Con todo bien integrado, ahora es el turno de agregar los ingredientes secos, la harina, el polvo para hornear y la sal. Los tamizaremos antes de agregar a los ingredientes húmedos. Y vamos removiendo despacito integrando bien. Si no echamos todo de golpe, lo haremos mucho mejor.
• Preparamos el molde donde hornearemos nuestro bizcocho. Cortamos y colocamos un trozo de papel de hornear a lo largo de nuestro molde rectangular y engrasamos con un poco de aceite o mantequilla y harina para que no se enganche.
  Con el molde listo, vertemos nuestra masa repartiendo bien por todo el molde.
  Damos unos golpecitos sobre la encimera para que salgan las burbujas que puedan haber en el interior.
• Con el horno precalentado a 180 °C calor arriba y abajo, horneamos nuestra masa durante unos 45 minutos.
• PASOS A SEGUIR PARA EL ALMÍBAR DE LIMÓN
• Mezclamos el azúcar con el jugo de limón y lo calentamos. O bien en el microondas unos segundos a potencia media, o en un cazo en el fuego hasta que el azúcar quede diluido.
• Con el bizcocho aún caliente y con la ayuda de un palillo largo, hacemos unos agujeros a nuestro bizcocho y vertemos nuestro almíbar sobre la parte superior para que el bizcocho se empape bien. Dejamos enfriar y retiramos del molde.
• PASOS A SEGUIR PARA EL GLASEADO
• Mezclamos el azúcar glas con el jugo de limón con la ayuda de una cuchara. Cuando tengamos la textura deseada, lo vertemos sobre nuestro bizcocho y lo dejamos reposar para que se endurezca. En unos minutos… lo tendremos listo para disfrutarlo

Notas

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