Empezaremos mezclando la harina de fuerza con la sal. En nuestro bol, pondremos toda la harina y la sal y con un tenedor lo mezclaremos bien.
600 g harina de fuerza, 12 g sal
En nuestro vaso batidor, pondremos el agua y la calentaremos en el microondas durante unos segundos. Con el agua templada, disolveremos la levadura fresca con la ayuda de un tenedor. 350 g agua, 15 g levadura fresca
Ahora toca integrar toda la mezcla. Para ello, vertemos el agua con la levadura en nuestro bol con harina y sal y mezclamos con un tenedor.
Cuando ya nos cueste seguir mezclando todos los ingredientes con el tenedor, seguimos con las manos. Debemos seguir mezclando hasta recoger toda la harina del bol. En ese momento, trabajamos la masa durante 5 minutos más.
Tapamos el bol con un paño de cocina y dejamos reposar la masa dentro del horno apagado, para que no haya corrientes de aire. Deberá de doblar su volumen, depende de la temperatura y humedad de tu cocina, tardara entre 1,5 o 2 horas.
Pasado ese tiempo, enharinamos la encimera o una superficie lisa. Recuperamos la masa y, sobre la encimera, le quitamos todas las burbujas de aire y la trabajamos otros 5 minutos.
Ahora, con el total de la masa, haremos 3 porciones iguales, les daremos forma de pelota y las dejaremos reposar unos 15-20 minutos.Si queréis congelar la masa, ahora es el momento. Pasado ese tiempo, ya tenemos la masa para nuestras pizzas caseras a punto. Solamente nos queda estirarlas con un rodillo. Si tenéis mana y paciencia, también se puede hacer con las manos como un@s autentic@s pizzer@s 😃