Cinnamon rolls o rollos de canela, ¿Cómo los llamas tú? Nosotros los conocemos por su nombre en inglés, pero seguro que si pides en castellano te entienden seguro 😉.
Descubrí estos excelentes bollos en un viaje al norte de Inglaterra, en Manchester, en un centro comercial. Había una chica que no paraba de gritar y se escuchaba desde cualquier parte. A lo lejos, no se entendía lo que decía, pero cuando te ibas acercando se escuchaba: “Cinnamon rolls sample!” repetidas veces…. Total, que probé uno y salí con una docena de la tienda, qué dulzor… qué sabor… 🤤🤤
Estos dulces de canela o bollos de canela, aparte de estar riquísimos, son magníficos porque se pueden tomar para desayunar o a media mañana con un café, pero también como postre o pasta después de una comida e incluso para merendar. Es una de esas recetas dulces que una vez que la pruebas, la repites seguro.
Como podéis ver, estos bollos de canela o rollos de canela se pueden comer durante gran parte del día y por eso os animamos a probar de hacerlos en vuestra propia casa, seguro que no llegan al día siguiente 😋
El origen de los cinnamon rolls o rollos de canela
El origen de estos bollos proviene de los países escandinavos, concretamente de Suecia y Dinamarca, aunque rápidamente se popularizaron en Norteamérica, concretamente en Estados Unidos. Y hoy en día, se pueden encontrar ya en casi cualquier lugar. Tanto es así que existe un día internacional para el cinnamon roll o bollo de canela, el 4 de Octubre.
Cómo hacer cinnamon rolls en casa
Cinnamon rolls
Plato: PostresDificultad: Media10
40
minutos20
minutos3
horas4
horasReceta dulce de origen sueco y danés perfecta para mojar en tu café
Ingredientes PARA LA MASA
400 g de harina de fuerza W220
20 g de levadura fresca
50 g de agua
100 g leche
55 g de mantequilla
40 g de azúcar
1 huevo
1 cucharadita de aroma de vainilla
Pizca de sal
- PARA EL RELLENO
100 g de mantequilla
50-60 g de azúcar (orientativo)
Canela en polvo (cantidad al gusto)
- UTENSILIOS
Molde redondo antiadherente (al menos 24 cm.)
Pasos a seguir
- En un bol grande, ponemos todos los ingredientes para la masa y los mezclamos bien con la mano o con un tenedor. Es decir, ponemos los 400 g de harina, los 20 g de levadura fresca desmenuzados, 50 g de agua tibia, 100 g de leche tibia, 55 g de mantequilla fundida, los 40 g de azúcar, el huevo, la cucharadita del aroma de vainilla y la pizca de sal.
- Si hemos usado un tenedor para mezclar los ingredientes, llegará un punto que cuesta mucho, ese es el momento para empezar a poner las manos en la masa! 😆
Tenemos que ir amasando con las manos durante unos 10 minutos. - Una vez pasado ese tiempo, tenemos que tener una masa que ya no se engancha y que está bien lisa. Apartamos la masa por un momento, ponemos un chorro de aceite en el bol y lo engrasamos bien. Ponemos de nuevo la masa en el bol y tapamos con un envoltorio reutilizable y esperamos durante 1’5 horas a que la levadura haga su trabajo.
- Una vez la levadura haya fermentado el tiempo necesario, enharinamos una superficie plana y dejamos caer sobre ella la gran bola de masa que tenemos. El siguiente paso consiste en estirar la masa con un rodillo y crear un rectángulo de, más o menos, medio centímetro de alto.
- Ahora toca usar los ingredientes del relleno para endulzar la masa estirada. Calentamos un poco los 100 g de mantequilla hasta que empiece a derretirse y vamos pintando con ella la masa estirada. Después repartimos de manera homogénea el azúcar (50-60 g) junto con la canela en polvo.
- Con la masa endulzada y condimentada, la empezamos a enrollar por el lado más largo para formar un canuto. Una vez hecho, cortamos el rollo en 10 porciones iguales y los colocamos, hacia arriba, sobre el molde antiadherente que usaremos para hornear, previamente engrasado.
- Ahora le toca trabajar a la levadura de nuevo. Cubrimos el molde con nuestro envoltorio reutilizable y lo volvemos a dejar reposar durante 1’5 horas de nuevo. Veremos que pasado ese tiempo nuestros bollos de canela han ‘engordado’ un poquito.
- 10 minutos antes de que la levadura haya hecho su faena, podemos precalentar el horno a 200 grados centígrados.
Y cuando los bollos de canela estén a punto, ya podemos introducir el molde en el horno durante unos 20 minutos, tendrán que estar doraditos por la parte superior.
Si os gusta mucho la canela, cuando los bollos salgan del horno, podemos espolvorear un poco más de canela en polvo.
Estarán de muerte! 🤤🤤
Notas
- Cuando dejemos reposar a la masa para que la levadura actúe, lo mejor es guardar el bol dentro del horno apagado. Así evitaremos corrientes de aire frío que pueden perjudicar el proceso. Además tendremos una temperatura constante.
- Si no tenemos tanto tiempo para dejar que la levadure leve, podemos precalentar el horno a unos 40 grados centígrados. En unos 40 minutos podemos obtener un resultado parecido.
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